El agua fría entra al colector solar por la parte inferior y sale caliente por la parte superior rumbo al acumulador, luego vuelve otra vez al colector. Está por tanto continuamente circulando en el llamado circuito primario.

La electrónica de control enciende la bomba de circulación para impulsar el agua, siempre y cuando la temperatura del captador sea más alta que la del acumulador.

El agua caliente de los captadores solares calienta a través del intercambiador solar, en primer lugar el depósito de almacenamiento de agua sanitaria. Con este agua podemos ducharnos, cocinar, y si además conectamos la lavadora o el lavavajillas ahorraremos electricidad, además de gas / gasóleo. A este uso se le denomina Agua Caliente Sanitaria (A.C.S.).

Tras acumular energía para el uso de ACS, la energía sobrante es transferida a un acumulador de inercia mediante el intercambiador de calor secundario. Este acumulador contiene el agua caliente requerida para la calefacción de la vivienda, que será distribuída mediante suelo radiante o radiadores.

El sistema que presenta mayor eficiencia energética y permite mayores ahorros es el de climatización por suelo radiante. Es un sistema de baja temperatura en el que el agua (entre 30º y 45º) circula por la red de tubos para conseguir que el suelo adquiera una temperatura de entre 22 y 27 grados, proporcionando un calor saludable, uniforme, regular y suave.

La energía que no pueda cubrirse con el sistema de captación solar estará compensada mediante un sistema auxiliar. El sistema convencional más eficiente son las calderas (gas o gasóleo), o chimeneas de pellets.

La electrónica de control decide en función de varias mediciones cuando es necesario el apoyo del sistema auxiliar y automatiza el funcionamiento integrado del sistema.

Por último, la energía sobrante, en periodos donde no se requiere calefacción será desviada a la piscina a través de su intercambiador para conseguir temperaturas de confort, ampliando así la temporada de baño.

Para piscinas particulares, una solución muy rentable es el sistema de climatización mediante Colectores de Polipropileno (sin cubierta de vidrio y sin aislamiento).

Permiten extender la temporada de utilización de la piscina a finales de primavera y principios de otoño.

La nueva normativa del RITE* prohíbe el uso de energías no renovables para la climatización de piscina tanto exterior como interior siendo obligatorio el uso de la energía solar que deberá aportar el 70% de las necesidades térmicas anuales.