Autoconsumo fotovoltaico. Placas solares Mallorca

Sí, pero es fundamental realizar un estudio de las necesidades reales que tiene el consumidor para que la instalación esté correctamente dimensionada y el aprovechamiento de la energía generada sea el máximo posible, procurando un modelo rentable y sostenible.

Un panel solar fotovoltaico estándar de unos 400 Wp de potencia pico ocupa 2m² y pesa 18 kg aproximadamente. En instalaciones coplanares con la cubierta, tejado, pérgola etc, la superficie que ocupan los módulos es prácticamente la superficie disponible. En cubiertas planas, azotea plana o suelo, si se instala una estructura soporte con inclinación, la ocupación sería aproximadamente el doble, por la separación entre filas para evitar sombras.

La energía solar que se vierte a la red se podrá gestionar obteniendo una compensación en la factura de suministro (compensación simplificada).

Existe también la posibilidad de almacenar la energía solar que sobra en baterías para tenerla disponible en el momento en el que sea necesaria.

La integración de un sistema de baterías es siempre posible en un sistema de autoconsumo, a corto, medio o largo plazo.

Contrariamente a lo que pueda parecer, si el suministro eléctrico proporcionado por la empresa distribuidora se interrumpe, también lo hace el sistema de autoconsumo.

En caso de que la línea de distribución se quede sin suministro la producción de las placas solares no se puede inyectar a la red eléctrica. Se debe garantizar la seguridad de las personas técnicas que actúan en sus operaciones de mantenimiento.

Si quieres cubrir esta posibilidad, deberás instalar baterías de acumulación para dar más estabilidad al sistema.

Tener baterías no es imprescindible, es opcional. Cabe mencionar que hoy en día, el hecho de añadir baterías puede suponer duplicar el precio de una instalación doméstica convencional.

La potencia de la instalación de autoconsumo está limitada por normativa.

La potencia de tu instalación solar de autoconsumo en Islas Baleares puede ser superior a la contratada, siempre que no supere la potencia admisible de la acometida, que coincide con los derechos de extensión vigentes y que tiene como valor máximo la potencia certificada por el boletín eléctrico.

Esta potencia admisible de la acometida corresponde a los derechos de extensión vigentes por un determinado punto de suministro. Estos derechos de extensión pueden ser iguales o superiores a la potencia contratada.

Debes definir el objetivo de tu instalación de autoconsumo fotovoltaico para tomar esta decisión: qué porcentaje de autosuficiencia quieres conseguir, qué grado de independencia energética representa, qué rentabilidad buscas, qué ahorro económico quieres obtener, etc.

Actualmente la normativa permite la compensación simplificada y económica de los excedentes de energía solar, por tanto, la energía que genere la instalación de placas y que no aproveches, se compensará en la factura eléctrica. Además, algunas comercializadoras eléctricas añaden el servicio bateria virtual, pudiendo acumular excedentes de un mes a otro sin perderlos. Esto hace que mejore el aprovechamiento de la energía solar excedentaria sin necesidad de tener baterías en la instalación.

Otra forma de aprovechar la energía excedentaria de tu instalación de autoconsumo solar en Mallorca es aprovechando el almacenamiento térmico. Puede resultar muy interesante combinar tu sistema solar fotovoltaico con un sistema de aerotermia, ya que estas dos tecnologías funcionan muy bien de forma conjunta.

El almacenamiento térmico puede realizarse con un acumulador de agua caliente sanitaria, con un sistema de suelo radiante… incluso la misma vivienda, edificio o nave también pueden entenderse como un gran acumulador. Si dispone de un buen aislamiento y los materiales de construcción son los adecuados para poder acumular frío o calor, se puede evitar tener que arrancar la calefacción en horas donde el precio de la energía es elevado.

Una instalación de autoconsumo tiene excedentes cuando el consumidor no es capaz de aprovechar toda la energía generada en el momento en que se produce, por tanto le sobra, tiene excedentes.

Autoconsumo directo. Es la forma más eficiente de ahorrar en la factura de luz. Se trata de consumir la energía en el mismo momento en que se produce. Al ser energía generada por la instalación de placas solares, no tiene coste.

En la autoproducción se aplica, además, el balance neto horario, es decir, que se hace un balance cada hora, entre la energía que se ha volcado a la red y la energía que se ha consumido de la red. Este balance se realiza al final de cada hora, y su resultado es lo que se aplica a la factura.

Compensación de excedentes (regulado por normativa). Según la tarifa que tengas contratada, el precio de compensación de energía excedentaria puede variar. El precio resultante de la compensación simplificada de excedentes será como máximo el precio de coste de la energía utilizada. La compensación es mensual.

Si en una factura el importe del excedente supera el importe de la energía consumida, la diferencia serán excedentes no compensados. Algunas comercializadoras permiten que acumules los excedentes no compensados, que generarán derechos de descuento que podrás aprovechar en las siguientes facturas.

Con Solarta Balear puedes hacerlo empleando el Monedero Solar o Bateria virtual, herramienta creada por Fenie Energía.

Efectivamente, existe la posibilidad técnica de desconectarse de la red, y las ganas de desconectarse de la red eléctrica son plenamente comprensibles. No obstante, es una infraestructura útil y eficiente que permite compartir energía entre puntos de suministro.

Un sistema eléctrico desconectado, compuesto por muchos puntos que funcionan de forma aislada es ineficiente. La la energía no puede fluir de un punto a otro, y obliga a un sobredimensionamiento de la capacidad de generación y almacenamiento en cada uno de estos puntos para asegurar el suministro eléctrico.

En consecuencia, lo interesante sería reivindicar de forma colectiva el buen funcionamiento de las redes de distribución para que estén verdaderamente al servicio y en manos de la ciudadanía.

El propósito de las instalaciones de autoconsumo en Islas Baleares no debería ser la desconexión de la red eléctrica, sino la generar energía para consumirla de forma directa y verter los excedentes sobrantes en la red, para que consumidores cercanos al punto de autoproducción puedan utilizarlos.

Si desea “desconectarse” de la red, se requiere un buen sistema de acumulación para almacenar la energía eléctrica a fin de que esté disponible en los momentos en los que no se pueda generar energía.

Únicamente para autoconsumos colectivos en edificios sujetos a Ley de Propiedad Horizontal (LPH) es posible la tipología sin excedentes acogida a compensación. No se cede energía físicamente a la red, pero la energía sobrante de algún consumidor asociado se le compensa en la factura y es usada por otro consumidor del mismo edificio, que la pagará como si la hubiese comprado a la red.

El balance neto horario es el saldo neto entre la energía generada vertida en la red y la energía utilizada de red en el tramo de una hora.

Es decir, de cada kWh de energía generada, no utilizada y vertida en la red, descuenta un kWh de energía utilizada de red durante esa misma hora. Si hay más energía vertida en la red que la que se consume, la diferencia pasa al mecanismo de compensación. Si en un tramo horario el consumo es superior a la generación, no hay energía destinada a la compensación y los kWh de consumo por encima de los kWh de generación se contabilizan al precio habitual de consumo.

La compensación simplificada en las modalidades de autoconsumo colectivo funciona de forma similar al individual, aunque tiene dos diferencias: se debe asignar un coeficiente de reparto de energía entre los participantes y se debe instalar un contador de generación.

En función del reparto acordado, se calcula qué parte de energía generada le corresponde a cada participante en el periodo de una hora. La energía generada que le corresponde a cada uno (energía neta generada individualizada) se reparte entre la energía que se utiliza (energía autoconsumida individualizada) y la energía que no se utiliza (energía excedentaria individualizada), que será la que se puede compensar en su factura eléctrica.

La energía excedentaria es aquella que ha sido generada por las placas solares fotovoltaicas y que como no se utiliza de forma instantánea, circula a través del contador y se vierte a la red eléctrica de distribución.

Esta energía se contabiliza en el contador en tramos de una hora. A partir de los valores registrados, se aplican dos mecanismos de manera consecutiva: primero se aplica el balance neto horario y en el momento de facturar, se aplica la compensación simplificada de excedentes.

El ahorro generado por cada kWh de autoproducción directa (autoconsumo instantáneo) es el triple de lo que ahorra un kWh compensado. Por tanto, el objetivo debe ser siempre adaptar al máximo el horario del consumo al horario de la producción.

Si dispones de un sistema de autoproducción, tu requerimiento de energía de la red disminuirá, pero no implica necesariamente que puedas bajar la potencia a contratar.

Para realizar esta valoración debes tener en cuenta los picos de demanda en momentos en los que no tengas generación propia, y la presencia de baterías en la instalación.

Debes revisar si en los momentos en los que estés generando poca o nada de energía puedes limitar tu demanda eléctrica: por ejemplo, si dispones de una instalación fotovoltaica en Mallorca debes pensar si puedes disminuir tu uso energético por la noche o en días con mucha nubosidad, momentos en los que la producción es nula o muy baja.

Aquí entra el condicionante de si se dispone de baterías u otros sistemas de acumulación en la instalación: el hecho de que haya baterías favorece poder bajar la potencia contratada, ya que estas pueden suministrar energía en los momentos en que no hay producción.